La juventud en La Chorrera y su compromiso con la equidad de género

31 de Agosto de 2020

FOTOS: ICIECH

Linoschka López está por cumplir 30 años, es activista social desde los 19, creyente en el empoderamiento de la mujer y el relevo generacional, jugadora de softball, representa a Panamá ante la alianza Latinoamérica y del Caribe por la Igualdad de Fight Inequality y preside la Red Juvenil Impulsos de Ideas Creativas en La Chorrera o ICIECH (@iciech_06) como los conocen en Instagram. Topógrafa de carrera, administradora y profesora universitaria, aprendió de políticas públicas gracias a los programas que el PNUD implementa a nivel Nacional.

La red tiene reglas claras para ser miembro y el límite de edad es 29 años, 11 meses y 29 días. También se ha establecido que el liderazgo sea compartido. Actualmente Linoschka preside la red y en las próximas elecciones solo se podrán presentar hombres. Ella tendrá un rol de asesoría.

“Nuestro grupo nació muy variado, éramos mitad hombres y mitad mujeres, hoy las mujeres somos mayoría y estamos trabajando para ampliar los espacios de participación de los compañeros” nos cuenta.

ICIECH tiene ocho años, Linoschka la ha presidido cuatro en dos periodos diferentes. Sus miembros promedian los 20 años y también hay adolescentes en su membresía, la menor tiene 15 años y la mayoría trabajan con la organización desde su inicio.

“Nacimos de un proyecto en 2012 que busco crear espacios para jóvenes en tres municipios del país, incluyendo La Chorrera. En ese momento se identificaron jóvenes que ya estuvieran organizados en diferentes iniciativas, yo inicie bailando ya que venía de un grupo de baile” agrega.

El programa Conjunto Ventana de Paz del PNUD fue de mucho apoyo para el arranque en 2012, El programa trabajaba en seguridad ciudadana. Partiendo de allí, el grupo se organizó e identifico trabajar en espacios para libertad ciudadana en temas de juventud. Con el paso de los años, siguen cerca de las iniciativas del municipio de la Chorrera y de los programas que el PNUD implementa en esa región del país, pero enfocados en población y desarrollo, trabajando con jóvenes en: empleo digno, derechos sexuales y reproductivos, equidad de género, vivienda digna y protección del medioambiente.

Los espacios de participación ciudadana para la juventud son su fuerte. “Identificamos a líderes y organizaciones pares y articulamos nuestro trabajo con ellos. También recibimos apoyo de parte del PNUD y la municipalidad para realizar un programa de voluntariado en temas de interés social para el distrito. Nos aliamos con otras organizaciones que trabajan en salud, deporte, derechos de la población LGBTI+, prevención de ETS, medio ambiente y servicios amigables de salud con el apoyo del Ministerio de Salud y el Fondo de Población de las Naciones Unidas, por ejemplo” nos menciona.

En 2018 se vincularon en la reactivación del consejo nacional de las juventudes junto a otras organizaciones de jóvenes. El consejo es un espacio nacional para el trabajo de políticas públicas enfocadas en jóvenes y reciben el apoyo del Ministerio de Desarrollo Social.

COVID19 ha sido una barrera para continuar trabajando, La Chorrera está entre los lugares con cuarentena estricta y la mayoría de los espacios están cerrados. “Positivamente hablando nos ha ayudado a coordinarnos mejor. Todos lo hacemos en línea sin limitante de hora para salir, esto ayuda a nuestros compañeros menores de edad. Hemos realizado campañas en redes, conversatorios y reuniones. Hemos continuados a pesar de la limitante de acceso a tecnología por parte de algunos miembros y el reto de conectividad al internet que tiene todo el país”.

Linoschka representó a Panamá en el foro global de juventud en Bali - 2012, allí se trabajó en el enfoque de población y desarrollo, también representando a los jóvenes panameños en foros nacionales, regionales y locales incluyendo la Asamblea General 47 de las Naciones Unidas.

“Estas oportunidades nos permitieron posicionar la red no solo como seguridad ciudadana, sino en otros aspectos como educación, género e integralidad. Cada miembro de ICIECH tienen un rol dentro de estos temas. Por ejemplo, Angela Arjona lidera el trabajo en integralidad, ella tiene una discapacidad, y aun así está muy comprometida, al igual que el resto de nosotros, en trabajar para no dejar a nadie atrás.”

Para futuro piensan crear más espacios de diálogos para temas de políticas públicas y necesidades de la juventud. La construcción de plataformas articuladas, ampliar su área geográfica de la capital de la provincia a todo Panama Oeste y ampliar espacios con otras organizaciones son parte del proyecto de crecimiento. Igualmente, la red trabaja junto a las organizaciones para impulsar el trabajo en el Municipio de La Chorrera y el Ministerio de Desarrollo Social para la creación de planes locales y políticas públicas para la juventud.

“No es fácil trabajar con otras organizaciones juveniles. Mi primera limitante y creo que para la mayoría de las mujeres es que tenemos que adaptarnos a diferentes roles. En mi caso como activista y estudiante, pero otras compañeras son madres, esposas, y atienden el hogar. En ocasiones el liderazgo por las mujeres encuentra obstáculos por parte de otros liderazgos en los que algunos jóvenes hombres se sienten desplazados y surgen conflictos que superar. Algunos nos ven como un peligro en el camino y es cierto - hay espacios en que no gusta el liderazgo femenino. A las jóvenes nos cuesta hacernos oír, participar; para una mujer joven estos se complican, inclusive desde el hogar”. Concluye.

El modo en el que involucramos a los jóvenes hoy determinará las perspectivas para el desarrollo sostenible y la paz del futuro. Hoy en día, los y las jóvenes, quienes constituyen la mayor parte de la población en la mayoría de los países en desarrollo, contribuyen visiblemente como actores políticos, innovadores, empresarios y consolidadores de la paz. Pero, al mismo tiempo, los jóvenes enfrentan barreras sociales, económicas y políticas desproporcionadas que les impiden desplegar todo su potencial. El PNUD trabaja en la inclusión de todos y todas para no dejar a nadie atrás, incluyendo a la juventud.

Lideresas como Linoshka, son parte de los procesos territoriales como el programa de Prevención de las violencias en Panamá, desarrollado por el PNUD, junto a gobiernos locales desde el 2015. Con la implementación de este programa, el PNUD ha creado los puentes para generar alianzas estratégicas con instituciones como alcaldías, con el fin de generar participación e incidencia de jóvenes en espacios de toma de decisión y en procesos claves como: la implementación de la Agenda 2030 en la territorialidad, creación de la oficina de juventud, el voluntariado juvenil de la Municipalidad de La Chorrera y planes locales sobre juventud, entre otros.